TIPS PARA EL CUIDADO

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1.- Mantener la joyería comprada en su cajita o una bolsa de tela para evitar la humedad y el roce con otras piezas que las rayan (Puede añadir a esta caja o bolsa un sobre antihumedad o arroz). 

2.- Ponerse la joyería de chapa, rodio y acero una vez que ya esté seca su piel de las cremas y productos que suele ponerse (incluyendo el perfume). 

3.- No bañarse con la joyería de chapa, rodio y acero y tampoco usarlas en la alberca y mar.

4.- No lavarse las manos o lavar trastos con la joyería pues los jabones y detergentes recortan la vida del recubrimiento brilloso. 

5.- No hacer actividades manuales con la joyería para evitar romperlas, rayarlas o que tengan contacto con sustancias químicas que las averíen.

6.- Al terminar de usarla, ayuda mucho limpiar las piezas y quitarles los excesos de químicos y sudor que pudiera haberle quedado. Solo utilice una tela de algodón.

7.- Utilice las franelas especiales para joyería (de venta en nuestra tienda en línea) solo cuando haga falta en sus piezas de chapa, rodio y acero (con una sola pasada queda) y para la plata puede usarlas cada que se las ponga para darle brillo a sus piezas. 

8.- Las piezas que desvanecen más el recubrimiento de chapa, rodio y acero son los anillos, pulseras y cadenas por el contacto directo con la piel y los químicos que se ponen en esas áreas.  Utilice estas piezas ya que tu piel esté bien seca.

9.- Puedes poner una ligera capa de barniz ocasionalmente en tu anillo en la parte de abajo donde roza la piel para mantener más tiempo su brillo, así como en los dijes que tienen piedritas muy chiquitas para que a través del uso no se vayan perdiendo.